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mística






Viernes 24-06-2016
24-06-2016

Una experiencia mística no llega siempre por su cuenta. A veces el místico tiene que recorrer “el camino de la purificación y de la iluminación” al encuentro con Dios. Este camino consiste en una vida sencilla y diversas técnicas de meditación. De repente el místico ha alcanzado la meta, y él o ella exclama: “Soy Dios” o “Soy Tú”.

- Jostein Gaarder. EL MUNDO DE SOFÍA. Ed. Siruela.












No pienses que puedes alcanzar la conciencia total y la completa iluminación sin una disciplina y prácticas apropiadas.
Eso es egomanía.
Los rituales adecuados canalizan tus emociones y la energía de la vida hacia la luz.
Sin la disciplina para practicarlos, caerás constantemente retrocediendo en la oscuridad.

He aquí el gran secreto:
Lo mismo que la elevada conciencia de la verdad sutil se obtiene por medio de la conducta virtuosa y de las disciplinas constantes, también es mantenida por ellas.
Los seres altamente evolucionados conocen y respetan esta verdad.

- HUA HU CHING. 81 meditaciones taoístas. Lao Tse.













Yo no soy un místico, más bien soy un pecador recalcitrante. Pero en una ocasión, hace muchos años, conocí a un místico, un chamán. Y he de decir que su presencia sobrecogía.

Era Claudio Naranjo.

Media vida ha pasado desde entonces y todavía lo recuerdo. 

        Yo precisaba de su ayuda, y él me la brindó. 

         Pero como una bella flor que precisa de riego, abono y cuidados, hay regalos que tan solo podemos aceptar, agradecer y ver cómo una vez en nuestras manos pasan por las distintas edades hasta marchitarse.

Nada es permanente.

Osar pensar que se puede conservar un regalo, atesorándolo, creo que es infravalorarlo. 

         Más bien hay que prestar atención a que aquellas personas que nos conceden un don, son un ejemplo vivo por ellos mismos. 

          Y lo que nos dejan, tal vez, es tan solo la sed y un hambre que no se sacian fácilmente. 

          Pero la flor muere, el pájaro pierde la facultad de volar y muere también.

¿Quién puede juzgar la calidad de un regalo si pretende conservarlo para siempre, y éste desaparece?

Las experiencias pasan. 

         Tal vez lo único que quede sea una sed y un hambre que no se pueden saciar, y tal vez, yo juzgo que esto ni siquiera es suficiente. 

           A veces me parece que preferiría tener una herida abierta, el dolor, antes que la simple vida desordenada en la que me encuentro.

“Lo mismo que la elevada conciencia de la verdad sutil se obtiene por medio de la conducta virttuosa y de las disciplinas constantes, también es mantenida por ellas”.

Así, el trabajo no es el objetivo de ninguna verdad última. Sin embargo, el trabajo, simplemente, no puede obviarse y es necesario.






flores de cerezo



“- ¡Alto! Es un crimen. Demasiada crueldad. La mosca de mayo vive un día. Un sólo día de dolor. Un sólo día de pasión.
- Que vuele hasta el final. Su paraíso es eterno. Sólo un día para remediar. ¿Cierto?” 




            Tal vez lo único que quede sea hambre y sed. Un hambre y sed, en una vida desordenada. Y el deseo incluso de que el dolor sea mayor. Antes que perder eso también.










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