Sábado 28-01-2017 20:08 Horas. llegarás hasta aquí. No más allá Tengo ante mí un damero. Un tablero lleno de casillas. De unos dimensiones de ocho por ocho. Toda la extensión de mi vida. Y toda mi vida estuvo plagada de tensiones. Las tensiones no se ven pero se huelen. Se sienten, en el sentido más extenso. La primera lección que Don Juan impartió a Castaneda, y que fue la señal de que sería posible un aprendizaje, fue la de encontrar el propio lugar de poder. En la batalla, en la guerra, en brujería. Hay que saber cuál es el propio sitio, el más favorable. Esa lección la aprendí muy pronto. Conozco muy bien el espacio. Sé dónde ubicar mis piezas, conozco todas las casillas del damero. ¿Es eso una fortaleza? ¿Puede resultar en ser una debilidad? Ahora mismo, creo que podría ser un obstáculo al aprendizaje. Sé qué lugar ocupar para no correr peligro. Pero para crecer, es necesario que se acumule una cierta cantidad de
lo bueno es enemigo de lo mejor