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mirada de niño, eneagrama y poder

la vida puede ser la mirada de un niño


No hay nada nuevo bajo el sol. Eso dicen.

De niño me costaba hacer cosas “de niño”. Lo que mejor se me daba era mirar a los otros niños jugar. Me quedaba en un rincón y miraba. Creo que sufrí. No estoy seguro de si importa eso o no.

En mi vida, no he hecho grandes cosas. Más bien se trata de que no he hecho nada muy importante. Sí, que me he enfermado de gravedad. Y desde la enfermedad, he visto cosas. He visto la vida desde cierta perspectiva. 

         ¿Desde cuál? Pues no sabría decirlo.


¿Qué tiene eso que ver con el eneagrama y el conocimiento?

Pero el caso es que siento mi vida un tanto rara. Ahora tengo que empezar por el principio para llegar al final... ¿No es así?

Al final de todo, hoy en día, pienso que me gustaría quedarme a un lado y dejarme dormir. 

       Es decir, es como abandonarse a la vejez. El cuarto enemigo natural en el camino al conocimiento, según Castaneda.

          Y eso evoca, y me lleva a cuando era niño. 



los niños creen en Superman

Siendo pequeño pensaba a menudo en lo que sería tener una voluntad. Ser capaz de todo. De hacer lo que me propusiera.

Tal vez de ahí me viene la curiosidad acerca del eneagrama. Porque habla de trabajo. Y yo no podía trabajar. Me mantenía aparte. Mis compañeros de colegio dicen que yo sí que hablaba. Tal vez yo estuve más presente allí de lo que pensaba.

       La vida se tendrá que terminar. ¿Pero se puede hacer algo que merezca la pena haber hecho en ese lapso de tiempo?

Adquirir voluntad podría ser una cuestión a debatir. ¿Qué es eso de la voluntad? 

      Porque en algún lugar he oído que la voluntad no tiene una forma definida. 

No se sabe bien qué es esa cualidad llamada voluntad. Incluso alguien dijo que la voluntad no existe. 

      Tal vez un ego bien amueblado ofrezca mejores garantías en cuanto al manejo del día a día, que el tener una voluntad.





Los cuatro enemigos naturales del hombre, según el don Juan de Castaneda, serían: 

          El miedo, la claridad, el poder y la vejez.




No está mal.

En cuanto se refiere a completar un proceso, analizado mediante el eneagrama, los pondría en los cuatro últimos pasos. 

Es decir, el miedo claramente en el punto 6. La claridad, en el punto 7. El poder en el punto 8. La vejez en el punto 9.



La verdad es que miedo, claridad, poder y vejez, evocan, cualidades que resuenan con los nombres en el eneagrama. 

Por lo menos a mí me parece muy adecuado asentarlos al final de todo el proceso en la adquisición de conocimiento. 

Y el proceso de ser un hombre de conocimiento tal vez se pueda describir en el eneagrama. 

        Si es así, está bien que los mayores enemigos de un hombre de conocimiento estén al final del proceso. 

Donde cuenta todo lo importante.




En el proceso de hacerse un hombre de conocimiento, en el caso del grupo de Castaneda. Parece que era esa una enseñanza muy limitada, es decir, se limitaba a unos pocos individuos seleccionados. 

        Pero era muy intensa.

Es probable que los enemigos se fueran derrotando de uno en uno. Uno tras otro. 

     Pero en la vida de cualquier otro mortal, no se ha derrotado al miedo y ya asoma su cara la claridad. 

       El poder no se tiene tan claro si lo es, realmente. ¿Quién manda en tu vida? ¿Tu o tus circunstancias? 

       Y la vejez. La vejez aparece si te quedas sentado, esperando que algo cambie.

La vejez aparece si no tomas la resolución de hacer tu mismo lo que debe hacerse. 

        Vivir. Y hace falta mucha fuerza de voluntad para vivir.

Morir es fácil. Volverse loco es fácil. Lo más difícil es vivir, y más difícil todavía es tener una buena vida. 

          Saber lo que la vida es.




Me gustaría saber qué es eso, ¿Qué es una buena vida? 

¿Qué es vivir realmente?



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En este escrito menciono el eneagrama. En el año 1992 firmé al hacer un curso de eneagrama con Claudio Naranjo, en Babia, Turre (Almería), un documento en el que me comprometía a no revelar lo aprendido allí.

Desde entonces han aparecido en el mercado libros que tratan acerca del eneagrama. Incluso Claudio Naranjo ha sacado libros aportando su visión acerca del tema. No en vano fue él quien trajo la comprensión del eneagrama aplicado a los eneatipos psicológicos a España.

Al escribir estas lineas tenía en mente el libro "Estudios sobre el eneagrama" de J. G. Bennett. En este libro se habla de procesos dinámicos y cómo evolucionan siguiendo el orden desde el punto uno al nueve.

Yo he citado los cuatro últimos, 6, 7, 8 y 9. Y en relación a otra enseñanza, la de Castaneda. De Castaneda no tengo mayor conocimiento que el de leer sus libros, como muchas otras personas.

Simplemente quiero poner de relieve que encuentro esos puntos en común entre ambas tradiciones. Si bien, no hablo de eneatipos, ni de caracteres psicológicos tal como los mostró Claudio Naranjo en aquel curso que hice con él.

Si alguien me indica que quite este ártículo, lo quito sin ningún problema. En cualquier caso mi aporte al eneagrama tiene, un enfoque referido a un proceso. No quiero meterme en descripción de eneatipos psicológicos.

Cualquiera puede desarrollar esta idea. Hago notar que en los puntos en que se produce un "choque" exterior a todo proceso, que serían el punto 3 y 6... me llama la atención que en el primero (3), el caracter de este choque es individual.

Mientras que en el segundo "choque" que proviene del exterior del proceso (punto 6), éste forma parte ya de un acontecimiento a nivel grupal.

Es decir. Tanto el proceso de trabajo en una u otra tradición, la esencia, la parte "que importa", se da en un entorno grupal.

En el punto 6 entran a formar parte los elementos que corresponden a La comunidad.

Para el trabajo en el eneagrama, como en otras enseñanzas (Como por ejemplo la que describe Castaneda en sus libros) es necesario la participación dentro de un grupo.

Para que lo que se tiene que cocer se cocine de la forma oportuna.


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